Bulgheroni estudia asociarse con Lázaro Báez para buscar petróleo en Santa Cruz

En febrero el gobernador de Santa Cruz, Daniel Peralta, intimó al empresario ultrakirchnerista Lázaro Báez, propietario de las petroleras Epsur y Misahar, a que exhiba un resumen detallado de las tareas realizadas en los siete campos petroleros adjudicados en 2007 a ambas empresas. El propietario de Austral Construcciones, involucrado en las últimas semanas en una denuncia por lavado de dinero, presentó documentación que hoy está siendo analizada por los técnicos del Instituto de Energía de Santa Cruz, la autoridad de aplicación sobre cuestiones hidrocarburíferas. Pero al mismo tiempo comenzó a buscar socios, con el respaldo del Gobierno nacional, a fin de incrementar la inversión en esos campos y, así, blindarse frente a un eventual avance de Peralta. En ese marco, Báez llegó a un pre acuerdo con los hermanos Carlos y Alejandro Bulgheroni -los empresarios petroleros más importantes del país, titulares de Bridas Energy- para asociarse en los siete bloques santacruceños, según confirmaron a El Inversor Online allegados a la negociación. Tres áreas están emplazadas en el Golfo San Jorge, la región donde los Bulgheroni -accionistas de la segunda petrolera de la Argentina,Pan American Energy (PAE), junto con la británica BP y la china Cnooc- construyeron su principal polo petrolífero a través del desarrollo de Cerro Dragón, el mayor yacimiento de crudo del país. Las cuatro restantes pertenecen a la cuenca Austral y aunque son bloques marginales, de alto riesgo geológico, poseen potencial gasífero. Por pedido de los Bulgheroni, un equipo de profesionales ya está evaluando la historia geológica de las áreas y los actividades realizadas en los siete campos: Meseta Cerón Chico, Río Guenguel, Sur Río Deseado, Paso Fuhr (adjudicadas a Epsur) y Tapi Aike, El Turbio y El Turbio Este, ganadas por Misahar. En 2007, Báez se comprometió a invertir, según la oferta económica comprometida, US$ 81,17 millones en los bloques, una cifra sobredimensionada según el consenso generalizado en la industria petrolera. Pero desde ese año hasta 2011, Epsur sólo perforó un pozo -no descubridor- en una de las siete áreas y concretó tareas sísmicas. No obstante, algunas fuentes advierten que la petrolera habría desembolsado cerca de US$ 20 millones en 2012 para elevar el nivel de actividades. “De algunas áreas, como El Turbio, hay escasos antecedentes y prácticamente no se conocen trabajos realizados. En otras, como Tapi Aike, sí se perforaron pozos, aunque no con resultados favorables”, explicaron fuentes del Instituto de Energía de Santa Cruz. Se estima que los Bulgheroni, que a través de PAE lideran el ranking de las petroleras que más producción y reservas sumaron en la última década, adquirirán la mayoría accionaria de los proyectos y se harán cargo de la operación técnica de la exploración.
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