YPF está acelerando sus esfuerzos en Vaca Muerta, a medida que intenta transformar el shale patagónico en la próxima cuenca Pérmica. Su número de plataformas petroleras se duplicará a 10 en 2019 a medida que las empresas piloto con Petroliam Nasional Bhd de Malasia y Schlumberger Ltd. inician plena producción, dijo el gerente General, Daniel González, en una conferencia telefónica con inversores.
Esas áreas, que eventualmente podrían producir de 50.000 a 75.000 barriles por día, y un aumento en Loma Campana, un proyecto emblemático con Chevron, significan que el 20 por ciento del crudo de YPF provendrá de Vaca Muerta a fines del próximo año. La compañía apuesta en grande por revertir una caída sostenida en la producción general de petróleo y gas natural y alcanzar un crecimiento anual del 5 por ciento. La producción de YPF en el segundo trimestre se redujo al equivalente a 544.600 barriles de petróleo por día, casi el doble de la estadounidense Continental Resources. Aun así, la producción de shale aumentó a 55.900 barriles equivalentes desde 49.600 en el primer trimestre.
En Loma Campana la compañía hizo progresos. La producción comenzó a fluir desde su pozo más largo, que tiene unos 10.000 pies (3.050 metros) y tiene 40 etapas de fracking hidráulico, a un costo de u$s14 millones. Eso es más que en el Pérmico, pero YPF está rezagado en años respecto de los perforadores de Estados Unidos y se espera que los costos disminuyan, como ya lo hizo con los pozos más cortos.
El próximo año, YPF planea agregar otra plataforma a las tres que ya operan en Loma Campana, al tiempo que intenta aumentar la producción solo en esa área a 100.000 barriles por día para el 2024. “También está ampliando las instalaciones de tratamiento y un oleoducto para estimular el desarrollo de 17 pozos experimentales existentes. Un piloto de 20 pozos con Total SA ha mostrado buenos resultados y las compañías están en conversaciones para agregar otros 40 pozos. YPF también está evaluando nuevos pilotos”, dijo Sergio Giorgi, vicepresidente de estrategia y desarrollo comercial, en la misma conferencia telefónica.
Mientras tanto, los inversores han puesto en duda la viabilidad de la perforación de gas shale a medida que el gobierno se aleja de intervenir en el mercado de gas natural. En cambio, planea que los generadores de energía subasten contratos de suministro directamente a los productores, lo que podría reducir los precios.
González descartó las dudas. “Mientras esas subastas tengan la capacidad de bajar los precios del gas durante el verano y subir los precios durante el invierno, deberíamos estar bien. Si tenemos razón, en términos de convergencia de precios» a entre 4,50 y 5 dólares por millón de unidades térmicas británicas, «puedo decir que no pone en peligro ninguno de nuestros proyectos de gas shale”, señaló.
Fuente: Bloomberg