Aggreko brindará un innovador sistema de energía híbrida en Chile: “Es fundamental la relación de confiabilidad entre empresas”

La empresa líder en servicios de energía modular y móvil, Aggreko brindará un sistema de energía híbrida innovador para una mina de oro de la minera Gold Fields, que permitirá reducir U$S 7,4 millones en costos de energías en los próximos diez años y, además, se ahorrarán U$S1,1 millones en de impuestos al carbono. Pablo Varela, Director Ejecutivo de Aggreko para Latinoamérica y el Caribe, conversó en exclusiva con El Inversor Energético & Minero y brindó detalles del flamante proyecto.

Sistema de generación híbrida

En primera instancia, desde la empresa destacaron que el contrato firmado con el operador minero global Gold Fields es por diez años, periodo durante el cual se proporcionará un total de 25,9 MW. Se trata de una solución híbrida de energía solar y térmica a la mina a cielo abierto llamada Salares Norte, en Chile. 

Debido a su localización remota (190 km de la ciudad más cercana y más de cuatro mil metros de altura), el sistema está compuesto por distintos grupos electrógenos diesel de alto rendimiento, que fueron hechos especialmente a medida y de esta manera, logran una aplicación óptima.

“Estos grupos entregarán 772KW cada uno e incorporarán unidades funcionando en modalidad ‘Spinning Reserve’ y ‘Cold Reserve’ para gestionar de manera eficiente los picos de demanda. Este sistema de generación diésel se integrará con una planta de energía solar, proporcionará 9,9 MW de energía sin emisiones”, resaltaron desde Aggreko en un comunicado.

Inversor Energético & Minero: ¿Cómo se logra un sistema específico en un lugar tan remoto como es Salares Norte?

Pablo Varela: El lugar en sí es muy típico en lo que es minería chilena: está ubicado en los Andes, a 4500 metros de altura y por eso se considera un lugar remoto. Como las operaciones de oro son por lo general más chicas, se hace necesario generar la energía localmente y se tiene que llevar una planta de generación al sitio. Por eso, hace poco más de dos años que con Gold Fields llevamos desarrollando esta mejor solución. 

El primer punto principal a evaluar es la confiabilidad: se tiene que generar una planta de generación que no puede parar nunca porque es muy remoto y la solución más confiable fue generación térmica. Después de evaluar gas o diesel, se decidió por diesel. Pero además, Gold Fields tiene un compromiso de utilizar al menos 20% de energías renovables en todas sus operaciones, que también está alineado con la estrategia energética de Aggreko de agregar híbridos. Así que trabajamos en ver la mejor forma de adaptar la solución y se llegó a esta opción que permite ahorrar emisiones, ahorrar plata y ser confiable.

INV: O sea que es posible generar soluciones amigables para con el medio ambiente y además, ahorrar dinero.

PV: Exacto. Se trata de encontrar el equilibrio justo y en este caso, se logró un híbrido que es un equilibrio entre lo más confiable posible, lo más sustentable posible y lo más barato. Lo interesante es que es un proyecto a diez años porque esa es la vida útil esperada de la mina y durante ese tiempo, la tecnología puede cambiar. Probablemente, de acá a cinco años haya nuevas tecnologías que se puedan incluir para tener siempre lo más eficiente y ambientalmente amigable posible.

INV: ¿Cómo fue la modalidad de trabajo con Gold Fields y cómo afectó la pandemia por COVID-19 en ese sentido?

PV: En los últimos dos años, se trabajó específicamente en el diseño y se hicieron muchísimas reuniones remotas con el cliente. Algunas pocas presenciales. Es por eso que no se atrasó tanto el desarrollo del proyecto por el tema de la pandemia. Desde Gold Fields están ahora empezando la construcción del proyecto y los protocolos son muy importantes, como hisopados para subir a la mina o conformación de burbujas, a los que nosotros nos estamos adaptando. Si bien la operación se vuelve un poco más tediosa y costosa, es posible la construcción de la mina y eso es lo más importante. 

INV: ¿Cómo lograron adaptarse a las necesidades de la mina y la empresa?

PV: Es fundamental la relación de confianza entre empresas. Con Gold Fields trabajamos juntos hace quince años juntos en múltiples proyectos. Conocer la estrategia e intereses de la empresa en general, y no verlo solamente como una situación puntual de venta de un proyecto, nos ayuda mucho a ponernos en el lugar del otro y generar empatía entre empresas. Así genera una relación de largo plazo y se llega a una solución final, que mejor se acomoda al cliente. 

INV: Por último, ¿cuáles fueron los desafíos que se presentaron a la hora del diseño?

PV: En primer lugar, la generación en altura es una complejidad en sí misma porque hay menos oxígeno, menos presión y los generadores no funcionan de la misma manera, por lo que hay que adaptar las máquinas. Hubo pruebas en campo que permitieron probarlas y testearlas. Además, hubo que diseñar la planta para cualquier situación ambiental de vientos muy fuertes. Por eso, se reforzaron mecánicamente los paneles para que no se vuelen ni destrocen. Por último, hubo que darle a la planta la capacidad de aguantar varios días sin recibir gente ni combustible, en el caso de que las rutas se vuelvan inaccesibles por cuestiones climáticas. Además de la operación local de la planta, hay sistema de remota. Tenemos dos centros de control, uno en Buenos Aires y otro en Manaos (Brasil) para poder monitorear las plantas.

Salir de la versión móvil